Los peores presagios se han cumplido. Tal y como avanzó el ministro de Fomento durante una visita a Albaida, la reforma del tren Alcoy-Xàtiva tendrá que esperar. De momento, la línea ferroviaria ha desaparecido de los Presupuestos Generales del Estado para al año próximo y todo parece indicar que el convenio con la Generalitat para la mejora y la posterior cesión del tren se ha convertido en papel mojado.
Hay que recordar que el Ministerio de Fomento incluía en los presupuestos de los años 2009, 2010 y 2011 un total de 16 millones de euros para obras en este tramo ferroviario. Las partidas de los ejercicios anteriores no se han llegado a ejecutar y la del próximo año simplemente ha desaparecido de las previsiones presupuestarias. Los recortes económicos por la crisis vuelven a dejar el tren Alcoy-Xàtiva en situación incierta y aplazan sine die su reforma. Al margen de estas cantidades, hay que señalar que el acuerdo con la Generalitat obligaba a Fomento a invertir 35 millones de euros en el tren.
Si a estos hechos le añadimos que la Generalitat ya hace años que ha congelado sus inversiones en el tramo, ya que ni siquiera cubre el déficit de la línea, el resultado es un panorama muy pesimista. El servicio seguirá en su actual situación precaria en la que sólo se realizan trabajos de estricto mantenimiento.
La noticia sobre el incierto futuro del tren se produce el mismo día en que la línea volvía a abrirse al tráfico, tras casi 20 días de cierre por los daños causados por los incendios de principios de septiembre en las traviesas.
Hay que señalar, en otro orden de cosas, que los Presupuestos de 2011 también incluyen dinero para completar los tramos de autovía del Barranc de la Batalla y de El Comtat. En el caso del Barranc de la Batalla, la obra ha acabado duplicando sus costes, pasando de los 50 millones iniciales a 103.
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